viernes, 26 de abril de 2013




LA MUSICA COMO TORTURA / LA MUSICA COMO ARMA

SUZANNE G. CUSICK
 
 

Una de las características principales de la música de la posguerra de Estados Unidos es el uso persistente de la música como arma de guerra, de esta misma forma es importante mencionar que el ensayo fue hecho desde la vida personal del propio autor.

 

Es entonces donde a lo largo del ensayo se nota la forma en cómo se utiliza la música o bien es así como lo percatar, y esta forma es el introducir música en lugares en donde culturalmente no se escuchan un ejemplo de ello son las canciones de Metallica y Barney (el dinosaurio morado) las cuales eran utilizadas en las interrogaciones de los detenidos Iraquíes aturdiendo una y otra vez con las mismas canciones, otro ejemplo es el de Christina Aguilera con la que despertaban a los prisioneros a media noche.

De esta misma forma se toma como tortura sin contacto porque como ya lo había mencionado solo se emiten sonidos  y es tortura  por la fuerza con la que se emite el sonido.

Las armas “acústicas” han sido desplegadas por contratistas que trabajan para el Departamento de Defensa desde, de la creación en 1997, de la Agrupación Común de Armas No-Letales.
 

El principal contrato para estas guerras se firmó el 18 de noviembre de 1998 calificando la producción de alta precisión de infrasonido diseñado para producir efectos que pueden ser impactantes o letales, asimismo también fue inventado para paralizar multitudes hostiles o secuestradores.

 

En cuestión de que se fundamente, depende mucho de la música que se le emita y en donde se emita, ya que también  depende del lugar en donde se encuentre la persona a la cual se le trastornará con los sonidos, de  esta misma forma si se encuentra encadenado, o amordazado etc.

 

Asimismo con el paso del tiempo se fueron ampliando armas que con mayor dimensión, y que se pudieran utilizar en todos los estados naturales encargados por los estados unidos para equilibrar a los enemigos durante la guerra.

 Por otra parte es preciso mencionar que estos factores sonoros alteran los nervios del capturado, ya que la música es el medio del poder general  que toca sin tocar. La música, entonces, no es únicamente un componente de la tortura sin contacto sino  un componente de la demanda simbólica de soberanía global por parte de los E.U.

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